Mientras el club avanza con mejoras en los exteriores del estadio, especialmente en la zona del vestuario de socios, también se están desarrollando obras que involucran al perímetro. Se retiraron las históricas paredes de ladrillo, se colocaron nuevos cerramientos y se aplicaron retoques de pintura que le dieron otra imagen al sector más transitado por los socios.
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En paralelo, Autopistas Urbanas S.A. (AUSA) comenzó con la readecuación del puente Ángel Labruna, una obra que impacta directamente sobre el costado del club. Como parte de las tareas, se derribó un tramo del paredón que da a la avenida Lugones, lo cual generó curiosidad entre los hinchas. Será reconstruido una vez finalizada la intervención vial en esa zona.
El proyecto contempla ensanchar la calzada del puente, agregar nuevas ramas de ingreso y egreso vehicular, y construir una pasarela peatonal más ancha. El objetivo es mejorar la conexión entre Udaondo, Lugones y Cantilo, zonas clave para el acceso al estadio en días de partido o grandes eventos como recitales.
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La obra se enmarca en una serie de transformaciones que vive el club en infraestructura. Mientras avanza la segunda etapa de renovación interna del Monumental, también se renuevan accesos, cerramientos y alrededores, en una apuesta integral por la modernización. La imagen externa de River cambia con el paso de los días, en un proceso que moderniza el entorno sin perder la identidad histórica del club y su vínculo con el barrio.
Además del impacto visual, estas obras buscan ordenar el tránsito y la circulación peatonal en una zona que suele estar colapsada. Las nuevas conexiones facilitarán la llegada y salida de miles de personas durante cada evento en el Monumental, mejorando también la seguridad.
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La imagen externa de River cambia con el paso de los días, en un proceso que moderniza el entorno sin perder la identidad histórica del club y su vínculo con el barrio. La renovación es parte del proyecto integral que sigue posicionando al estadio como el más importante del país.
