River logró un triunfo clave en el Gigante de Arroyito y el gran protagonista fue Maximiliano Salas. El ex Racing, que llegó al club de Núñez tras ejecutar su cláusula de salida en medio de una fuerte polémica, fue el autor del único tanto del partido a los cinco minutos y desató la locura de los hinchas millonarios en Rosario.
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El atacante no la tuvo fácil: desde su salida al campo de juego fue silbado y abucheado por la parcialidad de Racing, que lo trató de "traidor". Sin embargo, lejos de achicarse, Salas mostró personalidad y respondió de la mejor manera: con un gol que selló el pase a semifinales. "Para mí fue un partido normal. Nunca estuve nervioso ni nada. Había que jugarlo con tranquilidad", declaró después del encuentro.
Además, aclaró que mantuvo respeto por su ex club pese al hostil recibimiento: "Nunca se me fue de las manos el partido. Siempre me manejo con respeto hacia Racing por el cariño que me dio". Luego, reflexionó: "En los malos momentos hay que levantar la cabeza y entrenar con humildad. Es la única forma de superar los malos momentos".
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Finalmente, el delantero destacó el apoyo recibido del otro lado de la tribuna: "Creo que es lindo que la gente de River me reconozca, porque dejo todo adentro de la cancha y me mato por el equipo". Mientras Racing lo abucheó y lo insultó, el Millonario lo ovacionó y celebró su gol decisivo para meterse entre los cuatro mejores de la Copa Argentina.