La situación de Giuliano Galoppo encendió las alarmas en River a pocos días del inicio del 2026. El mediocampista perdió un juicio en el TAS por incumplir un contrato firmado con su exagente, Leandro Escudero, y deberá abonar US$731.000 para evitar una sanción deportiva. De no pagar antes del 3 de enero, el jugador quedará automáticamente inhabilitado y no podrá competir, lo que complica seriamente su continuidad en el Millonario.
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El conflicto explotó cuando se conoció que Galoppo había ignorado un vínculo previo con Escudero para avanzar con otros intermediarios. El TAS falló en contra del futbolista y ahora el monto debe ser abonado sin posibilidad de apelación. En este escenario, River tomó una postura clara: no continuará con la operación mientras el jugador no solucione su problema legal. La dirigencia ya se lo comunicó de manera directa.
El club también frenó la firma del acuerdo global que negociaba con São Paulo, operación que incluía además a Enzo Díaz y Gonzalo Tapia. Si Galoppo no regulariza su situación en los plazos estipulados, todo el paquete podría venirse abajo, generando un fuerte contratiempo en el mercado de pases que Marcelo Gallardo considera clave para rearmar el plantel.
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En Núñez esperan que el volante llegue a un entendimiento rápido para no quedar inhabilitado y así destrabar la negociación. El panorama, sin embargo, es delicado: la fecha límite es inminente y la resolución depende exclusivamente del futbolista, que deberá asumir el pago o acordar una vía alternativa para cumplir con la sentencia. River, por ahora, mira de reojo y mantiene todo en pausa.