River quedó eliminado de la Copa Libertadores tras perder 3-1 en Brasil contra Palmeiras, en una noche donde los detalles marcaron la diferencia. Uno de esos momentos clave fue protagonizado por Kevin Castaño, quien tuvo la posibilidad de convertir el gol que hubiese encaminado la clasificación. Sin embargo, su decisión dentro del área dejó una imagen que será difícil de olvidar.
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Cuando el partido estaba 1-0 para River, gracias al gol tempranero de Maximiliano Salas, el Millonario dominaba el clima del partido y se ilusionaba con dar el golpe. En ese contexto, una desconcentración de la defensa local dejó a Castaño cara a cara con Weverton. El colombiano, en lugar de definir con rapidez, intentó eludir al arquero y desperdició la oportunidad más clara de la noche.
Esa jugada, que pudo haber significado el 2-0 y una ventaja psicológica enorme para irse al vestuario, terminó siendo un punto de quiebre. Palmeiras reaccionó y River, otra vez, pagó caro sus falencias en la efectividad. En el complemento, el Verdao se acomodó, resistió y terminó dando vuelta la historia con dos tantos del Flaco López.
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La frustración de los hinchas se multiplicó en redes sociales, donde apuntaron directamente contra Castaño, cuyo rendimiento ya venía siendo criticado desde hace semanas. La jugada recordó a otras chances claras desperdiciadas en partidos decisivos, como la que falló Lucas Martínez Quarta ante Monterrey en el Mundial de Clubes. El colombiano, por el que River pagó más de 12 millones de euros, quedó marcado en una serie que pudo haber tenido otro desenlace.
Ahora, el Millonario deberá levantar cabeza y concentrarse en sus tres caminos para clasificarse a la próxima edición de la Libertadores: pelear el Torneo Clausura, sostener su lugar en la tabla anual o apuntar a la Copa Argentina. La bronca por lo que pudo ser en Brasil convivirá con el desafío de volver a empezar y no volver a dejar escapar las oportunidades que cambian series.