A pocos días de la revancha de cuartos de final de la Copa Libertadores, Palmeiras vive horas de incertidumbre. En San Pablo temen por la lesión de Kehllven, quien podría quedar al margen del duelo decisivo frente a River en el Allianz Parque. El lateral derecho es una de las piezas más utilizadas por Abel Ferreira en la rotación y su baja sería un golpe sensible en la planificación.
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El defensor arrastra una molestia muscular que lo obligó a trabajar de manera diferenciada en los últimos entrenamientos y, según medios brasileños, su presencia en el partido de vuelta está prácticamente descartada. Los médicos del club todavía no se animan a confirmarlo, pero todo indica que el futbolista no llegará en condiciones físicas para enfrentar al Millonario.
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Como si fuera poco, Palmeiras ya sabe que no podrá contar con Paulinho, quien también se perdió la ida en el Monumental. El atacante de 24 años, por el que el Verdao invirtió 18 millones de euros, padece una fractura por estrés en la tibia derecha. La lesión lo marginará no solo de la serie contra River, sino de todo lo que resta del año, lo que representa un verdadero mazazo para el cuerpo técnico.
Pero no es todo: el capitán Gustavo Gómez también encendió las alarmas luego de presentar molestias musculares. Desde el cuerpo técnico confirmaron que lo exigirán al máximo en la previa para intentar que llegue al encuentro decisivo frente a River el próximo 24 de septiembre en el Allianz Parque, en Sao Paulo.