Con la confirmación de que el juvenil no podrá ser anotado para los octavos de final por no estar en la lista de buena fe, el DT se enfrenta a un panorama complejo. El defensor, que había debutado con gran nivel, quedó fuera de carrera y obliga al cuerpo técnico a decidir entre opciones limitadas y con varios condicionantes físicos para enfrentar a Libertad.
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En este escenario, Sebastián Boselli es la única certeza. El uruguayo será titular frente al conjunto paraguayo en el Estadio La Huerta, al ser el único central en óptimas condiciones. Gallardo deberá resolver quién lo acompañará, y en un panorama ideal las opciones se reducirían a Paulo Díaz y Juan Carlos Portillo, aunque ambos llegan con dudas y sin ritmo competitivo.
El caso de Paulo Díaz preocupa especialmente: el chileno sufrió una inflamación en la rodilla izquierda que lo marginó del clásico con Independiente y todavía no tiene el alta definitiva. Por su parte, Portillo ya recibió el alta médica, pero acumula casi dos meses sin jugar, y la idea inicial del cuerpo técnico era darle minutos recién contra Godoy Cruz, por el torneo local.
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Si ninguno de los dos llega en condiciones, Gallardo podría apelar a Ulises Giménez, juvenil que no se entrena de manera constante con la Primera, pero que ya tuvo participación en la Copa Argentina este año. Incluso Federico Gattoni aparece como otra opción, aunque lleva más de un mes trabajando de forma diferenciada y su inclusión parece poco probable.